Colgamos a continuación el vídeo con la retransmisión de la misa funeral de fray Pablo María de la Cruz, carmelita.
El P. Desiderio García antes de comenzar la celebración saludó a los presentes y expresó el sentido de la Eucaristía: “Presentar al Altísimo a Pablo María de la Cruz y dar gracias a Dios por su vida”. Y recordó unas palabras que fray Pablo quería tener presentes en su funeral: “Diles, el que quiera seguir hablando conmigo lo tiene muy fácil: que se acerque a la Eucaristía, allí me tienen siempre en línea. Hermano, si sentimos el mismo fuego en el amor a Jesús-Eucaristía, tú y yo somos UNO”.
El Prior Provincial destacó en sus palabras que, con fray Pablo, todos hemos experimentado “una explosión de esperanza en todos los corazones, tan necesitados como estamos de ella. Una esperanza que abre el firmamento y se asienta en el cielo”. Como tenía Pablo: “Los pies en la tierra y el corazón en el cielo”. Hizo una lectura del camino de purificación y conversión que en estos años de enfermedad ha llevado a este joven a “tener el corazón muy lleno de Cristo” y a querer “la vida eterna”. Y recordó que la llamada que le hizo Cristo “ha ido inseparablemente unida al sufrimiento, a la enfermedad y al amor de cruz”. Un guerra en la que el amor ha vencido. Como decía fray Pablo, con serenidad: “Si aceptamos de Dios los bienes, ¿no vamos a aceptar los males? (Jb 2,10b). Si aceptamos de Dios todo, ¡todo es todo! (Fray Pablo María de la Cruz, carmelita).
Tras la comunión, tomó la palabra el obispo de Salamanca, Mons. José Luis Retana, y dirigiéndose a la familia de fray Pablo María de la Cruz, recordó la conversación mantenida con Ricardo y Mari Carmen, sus padres, el día durante la comida fraterna en la Fiesta del Carmen: “En ninguna de vuestras peticiones de un milagro habríais podido siquiera imaginar el bien y la belleza que habéis experimentado en todo lo que está rodeando la muerte de vuestro hijo, vuestro hermano y nuestro amigo Pablo”.