Del 6 al 16 de octubre de 2024 ha tenido lugar un curso internacional de formación permanente de la Orden con el título: “Tito Brandsma como carmelita, profesor, periodista y mártir: La contemplación, elemento dinámico que los unifica“. El curso se ha desarrollado principalmente en Nimega (Países Bajos) y ha terminado en Mainz y Dachau (Alemania) y ha contado con la participación de casi 40 hermanos y hermanas de todas partes del mundo.
El curso ha intentado mostrar la unidad existente entre las diversas facetas de nuestro querido Tito, acusado de “disperso” por sus coetáneos, por sus múltiples actividades. Los ponentes han mostrado el nexo común que unificaba toda la vida de Tito, la contemplación. Este pilar básico del carisma carmelita condujo toda la vida de Tito logrando que todas sus obras fueran una muestra del amor de Dios manifestado en su gran amor al prójimo.
Las ponencias fueron realizando un recorrido por la vida espiritual y pastoral de nuestro santo. Anne Marie Boss nos mostró la figura de Tito, un carmelita, resaltando la importancia de figura de Elías como modelo de vida para el carmelita y la llamada a la humildad para hacer bien las pequeñas cosas. Sanny Bruijns habló sobre la Dimensión mariana de Tito Brandsma, recogiendo la invitación que nos hace a ser otras marías, a dejar que María viva dentro de nosotros, para así poder encarnar la Palabra en nuestras vidas. La ponente nos invitó a reflexionar cómo es nuestra relación con María y cómo vivimos la dimensión mariana de nuestro carisma.
Ya en la tarde del día 8 de octubre, fr. Fernando Millán expuso la figura de Tito Brandsma, periodista, destacando la actualidad de su figura como explorador de un estilo de periodismo católico en búsqueda de la verdad con empatía, con honestidad y sin agresividad.
La siguiente charla corrió a cargo de fr. Benny Phang presentando la faceta de Tito como erudito. Conocemos un fraile poliédrico, polifacético… pero con un conocimiento muy profundo de la historia y espiritualidad de nuestra orden. Para Tito la teología fluye de la vida contemplativa, de su experiencia de Dios, esta cercanía a Dios es la que le permite hablar de mística, de teología.
Con la siguiente charla repetimos ponente, fr. Fernando Millán. En esta ocasión hizo un repaso a los últimos meses de vida de Tito y su paso por distintas cárceles y campos de concentración hasta su muerte: Azuhen, Shevenningen, Ammesfoort, Kleve y, finalmente, Dachau.
El viernes 11 de octubre Hettie Berflo nos habló de Tito a los ojos de sus contemporáneos, exponiendo diversos testimonios de algunas personas que le conocieron en momentos muy distintos de su vida y cómo coincidían en valorar su sencillez y cercanía, su gran fe, su entrega a los demás, su vida entregada a la oración, y lo más importante cómo basó su vida en Dios, encontrando en Él la fuerza para seguir adelante.
La última charla corrió a cargo del Prior General carmelita fr. Miceál O’Neill, que disertó sobre la faceta de Tito: mártir de Justicia y Paz. Comparó las figuras de Tito y el profeta Elías como buscadores de la verdad y luchadores contra la idolatría. Desde la visión contemplativa de Tito su conocimiento de Dios era conocer su justicia y por tanto defender su lugar en la sociedad en que le tocó vivir hasta llevarle al martirio.
Entre las actividades previstas para este curso hubo tiempo para peregrinar a los lugares en los que Tito vivió y sufrió en la última etapa de su vida. Visitamos la prisión de Scheveningen (Oranjehotel), donde escribió entre otras cosas su famoso poema Ante la cruz, la Vida de santa Teresa de Ávila, el ensayo ¿Por qué los católicos holandeses están en contra del nacional-socialismo?; el convento de Boxmeer, donde se encuentran los archivos con todos los documentos y pertenencias personales de Tito; el campo de concentración de Amesfoort y el campo de Dachau, donde tuvimos ocasión de compartir un momento de oración con las carmelitas descalzas que viven en un monasterio en el campo de concentración.