El día 1 de mayo, fiesta de san José Obrero, nos hemos reunido en Sigüenza (Guadalajara) los frailes de las distintas comunidades de nuestra Provincia carmelita para pasar un día de asueto y fraternidad. La primera etapa fue en el Parque de la Alameda para tomar el tradicional almuerzo. Posteriormente, nos reunimos en la Iglesia de las Clarisas para rezar la hora intermedia y la oración de S. Anselmo. A mediodía nos esperaban en la Catedral y en el Museo diocesano para la visita guiada. La Catedral de Sigüenza es un ejemplo de templo-fortaleza, hecho para orar y admirar. Esta majestuosa Catedral, origen y fundamento de la grandeza de Sigüenza es un museo vivo de arte románico, cisterciense, gótico, renacentista, plateresco, barroco, neoclásico… Espectacular. Nuestro periplo comenzó admirando el famoso sepulcro del Doncel, una de las mejores esculturas en alabastro del gótico tardío español, y acabó con una fotografía del grupo a los pies del profeta Elías (obra de Francisco Salzillo, el famoso imaginero murciano) proveniente del Convento carmelita OCD de los Santos Reyes de Guadalajara. A las 14.15 fuimos directamente al Restaurante Castilla para degustar el cabrito y el cordero de la tierra. Nos acompañaron los hermanos, P. Jorge Rivera, Comisario de las Antillas, y el P. Wilson, Rector de nuestra Casa de Formación de Santo Domingo.