La Residencia de Mayores Santa María del Monte Carmelo, ha publicado la Memoria del curso 2019, así como una reflexión de estos hechos. “Quien realiza obras tiene que reflexionar sobre ellas, interpretarlas, para darles orientación, significado y meta”. Todo un trabajo realizado que se enmarca dentro de lo que es la Residencia y la finalidad que persigue, su misión, visión y valores.
1.-“¿Qué es nuestra misión?, ¿qué somos?, ¿qué hacemos?, ¿por qué? y ¿para qué lo hacemos? La Residencia Monte Carmelo es una institución de carácter solidario, inspirada en los valores del humanismo cristiano, que tiene como principal actividad la prestación de servicios sanitarios destinados a cuidar y atender integralmente a las personas mayores. Además, apoya y orienta a los familiares y a los trabajadores”.
2.- “Aspiramos a que la Residencia sea un centro de referencia por su nivel de excelencia, que destaque por su calidad humana y asistencial, su saber hacer, su cualificado personal y su gestión eficaz… Los valores de la Residencia derivan del concepto de dignidad que posee toda persona. No queremos que se queden en una mera declaración de buenas intenciones, sino que debemos traducirlos en conductas concretas. Entre ellos, destacamos la humildad, unidad, actitud de servicio ética y honestidad, coherencia, excelencia y sosteniblidad medioambiental”.
3.- El Departamento de Atención Religiosa (DAR) se encarga de acompañar y sostener a los mayores en su condición humana y creyente, cuidando la vivencia y celebración de su fe, de modo que ésta ayude a afrontar de modo positivo y saludable las pérdidas, el dolor y la misma muerte. Dios, la fe, aportan la fuerza humanizadora que brota del Evangelio: compasión, respeto, ayuda mutua, reconciliación… Para ello, una serie de actividades, encuentros y celebraciones desarrollan estos objetivos: charlas religiosas (coincidiendo con el Adviento, Navidad, Cuaresma, Pascua, la fiesta de la Virgen del Carmen); celebración de los sacramentos (eucaristía, unción de los enfermos, sacramento de la reconciliación; la distribución diaria de la comunión a los residentes que están impedidos y no pueden participar en la Eucaristía), acompañamiento espiritual, etc.